23.1.14

Curioso meme de cine.

Estoy en racha de memes, por lo visto.  He encontrado por ahí uno bastante curioso sobre cine, pues se trata de elegir tu película favorita de cada año (según sea su año de estreno, se entiende)  desde el que naciste. Una tarea no siempre fácil, desde luego, no sólo por la cuestión de decidirse por ésta o aquella,  además porque a veces no basta con la memoria y se ha de recurrir a webs de cine para datar las películas y  ver una buena lista de las mismas en tal o cual año.

Intentaré ceñirme al "juego" y elegir sólo una, aunque conociéndome será inevitable que escriba más de la cuenta. Veamos...


-1985:  Sin dudarlo, REGRESO AL FUTURO. Los Goonies también es de este año, pero siempre me gustó más la de McFly. Además, la recuerdo con más cariño. Menciones especiales para  El jinete pálido, La vaquilla Una habitación con vistas.

-1986: Año de enormes películas este (y para haberlas podido ver en el cine, desde luego).   El nombre de la rosa y  Los inmortales tienen momentazos. El sargento de hierro...pocas veces me he reído tanto con una película, pero  LA MISIÓN, aunque algo lenta, es más redonda, más emotiva y más estimable, aunque sólo sea por Robert de Niro, Jeremy Irons, la música celestial de Ennio Morricone y los maravillosos paisajes selváticos (Casi nada...).

-1987:  Impresionante La chaqueta metálica y nostálgicas  La princesa prometida y El chip prodigioso, pero me quedo con  LOS INTOCABLES DE ELIOT NESS. El poder de atracción de la mafia...

-1988: Cinema Paradiso es buena, pero siempre he considerado modestamente que la banda sonora de Morricone es superior a la película.  Arde Mississippi es fantástica, y Willow me marcó bastante cuando era niño, pero  LAS AMISTADES PELIGROSAS es un peliculón novelesco. 

-1989:  Otro año interesante, con la secuela de Regreso al futuro y grandes películas, bien distintas, como Mi pie izquierdo, Batman, o Nacido el cuatro de julio. Pero también está INDIANA JONES Y LA ÚLTIMA CRUZADA, de la cual ya escribí  en su momento,  así que nada más cabe añadir. 

-1990: Además de Bailando con lobos y de Regreso al futuro III, para mí 1990 es mafia con  Uno de los nuestros  y  la tercera y última película sobre los Corleone. Difícil decisión. Gana por poco EL PADRINO. PARTE III

-1991:  En este año hay terror con El silencio de los corderos, magia Disney con La bella y la bestia y medievo con Robin Hood, príncipe de los ladrones, pero también un exitazo que marcó una época y   ha envejecido admirablemente bien: TERMINATOR 2: EL JUICIO FINAL.

-1992: Buena cosecha ésta. Drácula de Bram Stoker, notable, sin embargo queda por detrás de  Sin perdón, Reservoir Dogs y El último mohicano. Dilema. ¿Por qué me prestaré a estas elecciones? Me quedo con  EL ÚLTIMO MOHICANO  y su romanticismo heroico.

-1993: Pocos años hay con tantas grandes películas como éste. En el nombre del padre y Atrapado por su pasado son excelentes, y pocas me han marcado más que  Jurassic Park. Sin embargo, LA LISTA DE SCHINDLER son palabras mayores. 

-1994:  ¡Vaya cuatro en el noventa y cuatro! Pulp Fiction, Forrest Gump, Cadena perpetua y El rey león. Todas valen su peso en oro Lo lamento por Jules y Vincent, Simba y Forrest, pero a la cárcel con Andy Dufresne y su  CADENA PERPETUA.

-1995: Cuatro grandísimas películas, cada una en su estilo, como son  Rob Roy, Casino, Seven y Toy Story. Cualquiera ganaría.  Pero sería imposible que no eligiera  BRAVEHEART , por razones de sobra conocidas. 

-1996:   Tesis, Sleepers, Los demonios de la noche, El paciente inglés...pero hace unos meses vi  FARGO  y me alteró.

-1997:  LA VIDA ES BELLA, indiscutiblemente. Lo siento por los polis corruptos de  L. A Confidential y por Pacino en Pactar con el diablo. 

-1998: La máscara del zorro  y  Very bad things, buenas. Sin embargo,  que me perdonen "El Nota"  (El gran Lebowski) y Derek (American History X), pero tengo que  SALVAR AL SOLDADO RYAN

-1999: Es el año de Matrix, pero nunca me llegó. Con el paso de los años me he dado cuenta que La amenaza fantasma es bastante floja. Menos me canso de volver a ver  La momia,  Toy Story 2  Sleepy Hollow; Algo pasa con Mary  American Pie son dos mitos de la adolescencia. Por último,  Una historia verdadera es preciosa. Pero mi vena fantástica-medieval me impulsa a decidirme por EL GUERRERO Nº13.  ¡¡Valhalla!!

-2000: Hablar de este año es hacerlo de la superlativa Gladiator, especialmente. Y  de la grande El patriota.  Pero me decido por otra película que tampoco me canso de ver , tronchante y contundente,  y de la que también me sé escenas y diálogos hasta la obsesión:  SNATCH: CERDOS Y DIAMANTES.

-2001: Enemigo a las puertas  tiene su aquel  y  Training Day es hasta adictiva, pero este año estalló, para bien y para mal, la "tolkienmanía" de la mano de Peter Jackson: EL SEÑOR DE LOS ANILLOS: LA COMUNIDAD DEL ANILLO. Magnífico comienzo.

-2002:  Ciudad de Dios me encantó,  Camino a la perdición me fascinó, y  ¿qué decir de El señor de los anillos: las dos torres?. Pero gana  GANGS OF NEW YORK, aunque sólo sea por el extraordinario Bill Cutting de ese actorazo llamado Daniel Day-Lewis.

-2003:  Vaya añito...El señor de los anillos: El retorno del rey, Mystyc River, Kill Bill: Vol.1, Piratas del Caribe: la maldición de la Perla Negra, El último samurái... Sin embargo, debo honrar a una película extraordinaria de mar y guerra algo infravalorada: MASTER AND COMMANDER: AL OTRO LADO DEL MUNDO. 

-2004:  Hay emoción con Clint Eastwood en Million Dollar Baby y  "gore cristiano" con La Pasión de Cristo de Mel Gibson, pero también Tarantino,  siempre inclasificable: KILL BILL: VOL.2  (esa salida de la tumba al ritmo de Morricone...)

-2005:  Otro año realmente difícil. Spielberg volviendo por sus fueros en Munich, Viggo Mortensen como padre no tan ejemplar en  Una historia de violencia, o el renacer de un superhéroe (Batman Begins, para mí la mejor de la trilogía). Me gustó mucho Cinderella Man y Sin City también es adictiva. Luego está El reino de los cielos: una película con una trama débil,  actores reguleros -la espada de Orlando Bloom transmite más que él- y un mensaje histórico y político bastante discutible, pero en pantalla es un espectáculo y no puedo dejar de verla, ésa es la verdad. Pero también me encanta MATCH POINT, superlativa a bastantes niveles. (Y no sólo por Scarlett Johansson, malpensados/as...)

-2006:  Tremendo año. La segunda de Piratas del Caribe, Alatriste,  V de Vendetta, Infiltrados, El ilusionista... Las dos últimas un poco más por encima del resto, y ganaría por poco INFILTRADOS. Nicholson y Scorsese en Boston, vaya combinación...

-2007:   Lo recuerdo muy bien. El miedo como pocas veces en REC,  la mafia rusa de Promesas del Este y la yanqui en American Gangster,  los mayas de  Apocalypto y sobre todo, Leónidas y sus espartanos en  300. Imposible que no eligiera ésta.

-2008:  El caballero oscuro...notable, sí, pero prefiero la primera.  La noche es nuestra tiene muy buen estilo,   pero GRAN TORINO supera a todas. Eterno Clint.

-2009: Malditos bastardos, con sus golpes, aciertos y desaciertos, no me termina de llegar. Watchmen se hace algo larga, El luchador me gustó mucho y  Resacón en Las Vegas es una carcajada continua.  Sin embargo, CELDA 211  es uno de esos raros ejemplos con que el cine patrio nos sorprende -para bien- a veces.  

-2010:  Me encantó Valor de ley y cuando vuelves a ver Shutter Island gusta más,  pero TOY STORY 3  es una jodida obra maestra. Personajes como Lotso, el malvado "osito abracitos", son geniales y no se olvidan fácilmente, así como el final de la película. 

-2011:  No habrá paz para los malvados, Resacón 2, ¡ahora en Tailandia!, Jane Eyre...aunque también está EL ORIGEN DEL PLANETA DE LOS SIMIOS

-2012:  He visto muy pocas películas de 2012; ni las más conocidas,  como Django desencadenado o la tercera de Batman, ni otras más secundarias. Eso sí, ví  EL HOBBIT: UN VIAJE INESPERADO, para mí mejor que su continuación.

-2013: Como el año anterior, no he visto casi ninguna, y una de ellas es la segunda de El Hobbit... Pero GRAVITY   me gustó bastante.

15.1.14

¡¡Test mu-musical!!

  Como suele ser habitual, vuelvo a copiarle a la compañera Lalachan de su fantástica  biblioteca bloguera (a donde os recomiendo que os perdáis, en el buen sentido de la palabra) un MEME, una especie de test, esta vez sobre gustos musicales. Aunque es verdaderamente difícil decidirse por una canción en concreto, la verdad, y las respuestas no siempre son rotundas y lapidarias, pues podría decir cinco respuestas como mínimo de cada pregunta.    La música es otra de mis pasiones, y es increíble como se amoldan a momentos determinados, cómo te recuerdan personas o evocan acontecimientos o épocas concretas, y te animan, te alegran o te entristecen. Ya dije una vez que, aunque me suele tirar el rock y el heavy metal, mis gustos son bastante variopintos y me puede flipar tanto un pasodoble como Rhapsody o una canción italiana.  Allá vamos...

1. Una canción de tu infancia.

Lo siento, pero no puedo evitar no decir la de la intro de He-Man, esa mítica serie de los Masters del Universo que tanto nos marcó a los niños de los 80, volviéndonos locos y pidiendo a nuestros padres muñecos y cacharros. Yo la cantaba, de hecho, con mi espada luminosa en lo alto:  "El universo, ya está protegido/ por el poder de Grayskull/ con secretos poderes de este gran castillo/  He-Man luchará hasta el final/ ¡¡¡¡He-Man!!!!"...



2. Una canción de tu adolescencia.

De la adolescencia tardía, por así decirlo. Diría  "Aquí estaré", de Avalanch. Una canción que me marcó, me trae muy buenos recuerdos y tiene mucho significado. 


3. La mejor canción de la historia.



Tópico tal vez, pero  "Stairway to heaven", de esos dioses excesivos también conocidos como Led Zeppelin, es una verdadera escalera musical y mística  al cielo (la perfección), donde nada falta ni sobra. Empieza suave, tenue, para ir subiendo luego y por último acabar en calma. Pertenece además a esas pocas canciones que suelo poner muy de vez en cuando, para no "desgastarla", no banalizarla, no abusar de ella, no vulgarizarla. 



4. La mejor de tu grupo favorito.


¡Qué preguntas tan complicadas! Mis dos grupos favoritos son Led Zeppelin y Queen, y como ya he puesto una de los primeros para la mejor canción de la historia, vamos con Queen. Podría decir "Bohemian Rhapsody", pero digo "Innuendo", otra canción superior, rotunda e inolvidable, que me emociona tanto por la letra como por ser una de las últimas cantadas por Mercury. 

5. La mejor voz femenina.

Pues este último año he descubierto a Lana del Rey, y la verdad es que su voz, tenue, grave y como melancólica me encanta, así como sus canciones. 




6. La mejor voz masculina.



Sin ninguna duda, LA VOZ es  Freddie Mercury.



7. Una canción prohibida.



Cualquiera de Pablo Alborán.



8. Una canción que siempre te alegre el día.

"Hammer to fall", de Queen. Siempre me anima, me pone de buen humor y me da fuerzas cuando la escucho muchas mañanas (o a cualquier momento del día). 



9. Una canción que te marcó.



Me han marcado varias, pero podría decir "Ancha es Castilla", de los buenos tiempos de Mägo de Oz. Aunque "Ancha es Castilla"  es una expresión histórica,  la canción tiene bastante culpa de que este blog se llame así. Tuve una época que estrofas como "Todos soñamos con ser/ un caballero y tener/ algo por lo que luchar/ y un amor que defender" "Grítale al cielo que no/ quieres ser sólo uno más/ Ancha es Castilla y el sol/ tu caminar guiará" eran lo más de lo más.





10. Una canción que hayas escuchado más de tres veces seguidas.

Han sido varias, pero por ejemplo, "Wisdom of the kings", de Rhapsody. Hubo un tiempo que no me cansaba del doble bombo y de la mezcla entre guitarras, música clásica y letras sobre leyendas y héroes. 


11. Una canción para salir de marcha.



Podéis matarme, pero cualquiera de Pitbull ("Don´t stop the party""Feel this moment", por ejemplo). Sí, no tengo remedio, pero se trata de canciones para salir de marcha, ¿no? Y por lo menos a mí me entonan; no me voy a poner  "Dust in the wind" o alguna del Requiem de Mozart para salir...



12. La que quieres que suene en tu funeral.


Siempre suelo decir, medio en broma medio en serio, "In my time of dying", de Led Zeppelin. Pero supongo que me decidiría por  "Finale", del maestro Ennio Morricone, en la banda sonora de Once upon a time in the west (1968),  spaguetti western de Sergio Leone.



13. Una canción que te recuerde a tu amor.



Puede sonar algo ñoño, pero "Corazón contento", de Palito Ortega, es una de ellas. La canción expresaba muy bien cómo me sentía en esos primeros momentos de aquella relación, ya pasada.





14. Una pieza de música clásica.



Otra pregunta difícil...tras mucho pensarlo e indecidirme, digo "Wir setzen uns mit Tränen nieder" de La Pasión según San Mateo  de  Johann Sebastian Bach. Música celestial...



15. Estilo musical que más te gusta.

El hard rock y el heavy metal, especialmente los de los 70, 80 y principios de los 90. 






16. Estilo musical que no te gusta nada.


 Si digo el reggaetton mentiría como un bellaco  y no sería creíble, ya que, aunque no es ni de lejos mi estilo favorito y tiene muchas canciones infames, me hace gracia escucharlo y cuando salgo de fiesta me gusta, para qué negarlo...así que diré el death metal. 




17. Una canción que te dé miedo.

Miedo no sería la sensación correcta, pero siempre que he escuchado, ya fuera en la película o en el disco, cualquier canción de la banda sonora de La lista de Schindler (John Williams),   me produce desasosiego, con esas voces infantiles,  y me invade un sentimiento de entre pena y terror por el asesinato indiscriminado de judíos inocentes, tanto niños como adultos,  evocándome imágenes en blanco y negro de muerte, humo y ceniza. Es imposible alegrarse con una canción así o hacer algo positivo mientras la escuchas. 






18. Una canción que te haga sonreír.



Ahora mismo, no se me ocurre otra, y por razones obvias, "Te quiero puta" , de Rammstein. Más que sonreír, me río.  Si alguien no la ha escuchado nunca, ¡que vaya ahora mismo a ello!





19. Una canción que te ponga triste.


"Always on my mind",  pero la versión de Elvis Presley. Es una canción preciosa, y me encanta, pero me recuerda a cuando mi madre lo pasó especialmente mal (y lo sigue pasando) por mi culpa.





20. Una canción que te gustaría que te dedicaran.



Que me dedicaran, ¿quién o quiénes?. Quizá "With a little help of my friends", de Joe Cocker.





21. Un cantante o compositor por el que te decantarías.

Con tanto cantante, pasemos a un compositor moderno. Ennio Morricone, sin duda. Su música hace tiempo trascendió de las películas y desde hace mucho tengo el ipod (antes walkman y mp3) plagado de sus obras. 







22. Un grupo que, aunque no es de tu estilo, te gusta.

Rammstein, por ejemplo. 



 Y,  para terminar, una canción de regalo, la que quieras.

"More than a feeling", (Boston), una de las canciones de mi vida.


4.1.14

"El hobbit": La desolación de Tolkien.

Un año después de la primera entrega pude ver hace dos días "El hobbit: la desolación de Smaug"segunda de la nueva trilogía perpetrada (sí, perpetrada)  por Peter Jackson sobre el libro del mismo nombre acerca de la asombrosa aventura de Bilbo Bolsón. Como al poco de ver en el cine "Un viaje inesperado"  hablé aquí sobre ella, ¿por qué no analizar ahora la segunda, ya que está bien reciente? .  Y espero ser más conciso y breve que el año pasado. 

(Es posible que quien no la haya visto aún, no quiera que le sean revelados ciertos aspectos de la película. Por tanto, que no siga leyendo, o, si es de esas personas a quienes ello no le importa, que continúe.) 

Una vez contemplados los eternos 160 minutos de esta segunda película, se confirman  las ideas, las opiniones y las consideraciones tras la primera, e incluso surgen otras nuevas:

-Por lo pronto, se confirma a Peter Jackson como un tipo de lo más grandilocuente y ególatra, interesado en deslumbrar y extenuar visualmente y saturar hasta la náusea, exagerando al máximo (y no sólo en metraje) y, por supuesto, en seguir vendiendo su producto y haciendo caja. Ya dije que lleva camino de ser el nuevo George Lucas (en la parte negativa de éste). Pues sí. Alcanzó la gloria con la trilogía de ESDLA y no hay más que contemplar su filmografía posterior, con King Kong (una buena y disfrutable película, pero en donde ya se le empieza a ir de las manos), The lovely bones (un pastiche grandilocuente y excesivo totalmente vacío de contenido) y ahora esta nueva trilogía. 

- ¿Trilogía? Y no de películas de metraje medio precisamente, no. Trilogía...  ¿Dónde vas, Peter? (o dónde van las productoras).  De un libro de apenas 300 páginas no se puede sacar, es imposible, no hay redaños para tres peliculones de...169 minutos la primera, 160 la segunda...¿cuánto durará la tercera y última? Se irá otra vez a los 170 , supongo, por aquello de ser el broche. Y me gustan las películas largas, pero pocas veces he tenido esa sensación de "joder, ¿aún no acaba?". La falta de ritmo y la saturación de imágenes rápidas y de acción es constante y provoca eso, por lo menos a mí. Innumerables escenas se caracterizan por...un resbalo en un precipicio,  o una llave fundamental y el anillo que casi se caen al abismo, o  unos cuantos "este es el final, hasta aquí hemos llegado", etcNo hay descanso para nada, y lo peor es que la película no tiene pulso y el interés decae unas cuantas veces. Nos encontramos ante una trilogía de cerca de 500 minutos (o más) hecha a partir de un librito de menos de 300 páginas. Dos películas de entre 120 y 140 minutos cada una hubieran sido más que adecuadas.

- Se confirma  también lo de película entendida como videojuego. Si ya en la primera (y en ciertas partes de la trilogía de El señor de los anillos) se tenía la sensación de que se asistía a un logrado videojuego en el que ibas aniquilando a los enemigos aporreando los botones y las pantallas y los niveles se iban sucediendo, en ésta es tanto o más. Las maravillas de la CGI que nos asombraron a todos en La comunidad del anillo, Las dos torres y El retorno del rey ya no sorprenden tanto en estas dos nuevas películas, quizás por saturación y porque suena demasiado a ya visto. Hasta las arrugas de la cara de Gandalf parecen hechas por ordenador.  Un Gandalf quien,  por cierto,  lucha de nuevo  en una especie de puente de Khazad-Dûm. Por no hablar que la multiplicación de orcos y demás alimañas (añadido de Jackson) sirve para el lucimiento de personajes de la primera trilogía  inexistentes en el libro de Tolkien, como Legolas (nuevo añadido del director), y que sus flechazos, sablazos, decapitaciones y brincos entre las cabezas de los enanos llenen bastantes minutos. Esto empaña el buen trabajo en la recreación de ciudades y ambientes y en Smaug. El malvado dragón es realmente espectacular y es una maravilla verlo y sentirlo. 

- El tono. Hasta quien haya leído poco a Tolkien sabe que El Hobbit es un libro más infantil y hasta cierto punto intrascendente si lo comparamos con El señor de los anillos. El británico escribió el primero como un cuento de magos, enanos y dragones para entretener a sus hijos, y con ciertas dosis de heroísmo y epicidad. Pero ni hablar del enfrentamiento casi apocalíptico entre el Bien y el Mal, como sí se vio luego en la obra de El señor de los anillos y como se empieza a ver en esta nueva trilogía de Peter Jackson, donde además el Anillo Único ya es algo maléfico que comienza a corromper a Bilbo. Si en Un viaje inesperado se daba la extraña combinación entre situaciones desenfadadas y  ligeras y escenas gore, en esta segunda película el tono es más oscuro y épico, exageradamente épico; los enanos nunca lucharon contra Smaug dentro de Erebor, por ejemplo (no hay por dónde coger todo eso de las fraguas y la estatua de oro gigante).  No hubiera sido tan difícil mantener un estilo más o menos fiel al libro de Tolkien, y un tono digamos juvenil, risueño,  pero con ciertas y necesarias dosis de adultez, leyenda y épica.

- Se confirma también que Peter Jackson es todo un engordador de historias y tramas. Como le parecen insuficientes menos de 300 páginas para realizar una nueva trilogía que agrande su ego, ha de recurrir, no sólo a la informática, sino además a otras historias escritas por Tolkien para insertarlas o directamente a crear personajes nuevos, como la elfa Tauriel (protagonista de una especie de romance con un enano que haría remover al escritor en su tumba).  Y, desde luego, el incremento del factor orco se debe a él, con incesantes persecuciones e incluso una especie de  "comando orco" entrando por la noche por los tejados de Esgaroth. Por no volver a hablar de los excesivos minutos dedicados a Thranduil o a la estrella Legolas (en principio un cameo, pero vaya cameo...casi es coprotagonista).   Ya uno hasta  se espera que en la tercera salga por sorpresa Aragorn, echando una mano en el ataque de Smaug a la ciudad del lago. Bilbo, por contra, tiene bastante menos protagonismo del que se esperaba, aunque acertadamente se ha incrementado el de los enanos -aunque no mucho- profundizando en algunos de ellos. Luego, Beorn es poco más que intrascendente (omitiendo además lo cómico de la entrada en su casa como se lee en el libro),  Gandalf apenas tiene unos minutos y en cuanto a Bardo, su personaje es misterioso, heroico y atrayente (como en El hobbit) aunque bastante desvirtuado en general respecto a la obra de Tolkien (no es Aragorn, que quede claro),  por no hablar de las vodevilescas figuras del gobernador de la ciudad y de su "consejero" (un Grima II  totalmente inventado)  y de la innecesaria crítica sociopolítica que se introduce. Sin duda, la estrella y el gran descubrimiento de esta segunda parte es Smaug, pues es orgulloso, malvado y temible; además, en versión original cuenta con la voz de Benedict Cumberbatch y por lo visto resulta aún más extraordinario. 


Resumiendo, El hobbit: la desolación de Smaug, no es una mala película, por supuesto, pues es todo un espectáculo y entretiene pese a algunas lagunas,  pero a mí me supone una nueva bajada de nivel con respecto a la primera y confirma que las altas expectativas puestas en la versión fílmica de El hobbit (cuando se conoció que Peter Jackson las iba a realizar) van quedando cada vez más defraudadas. Y es una pena porque el arranque de La desolación... es fantástico, con una tensa  escena de diálogo entre Gandalf y Thorin en  "El  Poney Pisador".  Posiblemente, para quien busque espectáculo de CGI, saturación de acción y elfos dando estopa sin despeinarse, la película le encante, pero para quien crea encontrar una película de aventuras y leyendas con sus queridos personajes de las páginas, se va a sentir algo estafado o por lo menos levemente molesto porque realmente  no se esperaba que de la entrañable aventura de Bilbo y los enanos se pudiera perpetrar semejante huracán de efectos especiales, orcos e innecesarias historias románticas. Pero igual hay gente fan de los libros de Tolkien a la que le vayan encantando estas dos películas. Cuestión de gustos. 



+Lo mejor:  

- Smaug, tanto visualmente como cuando habla. Impresiona, intimida y maravilla.

- Bilbo y las escasas situaciones en las que es protagonista. Ahí sí es el singular, honesto,  astuto y valeroso hobbit. Fantástico Martin Freeman.

- Thorin y el resto de los enanos, aunque siguen sin ser tan importantes.  Insistentes, orgullosos e  interesados,  pero entrañables.  

- La recreación de ciudades como Esgaroth, Erebor  o  Bree  y  de lugares como el reino del Rey Elfo y sus respectivos ambientes.  Los  escenarios naturales de Nueva Zelanda. Eso sí es un espectáculo visual.

- La banda sonora (aunque no demasiado) y la fotografía. 


+ Lo peor:

- Personajes nuevos como Tauriel y lo que aportan y el exagerado protagonismo de otros colocados para recrearse como un cruel Legolas, el exceso élfico o la bandada incesante de orcos. 

- El inflamiento innecesario de la trama de la película  con sub-tramas, historias y personajes que desvirtúan o relegan a otros de la obra original. Y Bilbo pasa a un segundo (o tercer) plano.

- El uso abusivo de los efectos especiales. Bueno, abusivo es poco. Si hasta los ojos de Legolas están retocados... La huida en los barriles por el río es sólo un ejemplo del afán palomitero, videoconsolero  y de recreación exagerada de los responsables de la película.

-  La tendencia a lo grandioso, a lo excesivo, a lo cargante y arrollador,  de éstos últimos, sean quienes sean  (no sólo Peter Jackson como director y co-guionista va a ser el único responsable, desde luego). Cada frase, cada gesto,  cada movimiento de los personajes es un momento como ninguno, un hito, un escenón. Eso a la larga cansa, pienso humildemente. 

- El metraje. Sobran por lo menos 40 minutos. El ritmo y el interés no siempre es alto.